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El embajador español en Kenia ha llegado ya a la capital somalí, Mogadiscio, para ayudar a la liberación del pesquero 'Playa de Bakio'. Así lo ha confirmado el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en Los Desayunos de TVE. Ha llegado sobre las nueve de la mañana después de partir a las cuatro de la madrugada.

El diplomático Nicolás Martín Cinto está escoltado por cuatro geos, según ha informado desde la zona el enviado especial de TVE, Xaquín López. El objetivo de estos agentes del Grupo Especial de Operaciones de la Policía es garantizar la seguridad del diplomático. En ningún se contempla que intervengan en una acción con empleo de la fuerza.

El Gobierno decidió el martes enviar al embajador para acelerar el rescate del atunero vasco secuestrado el pasado domingo por un grupo de piratas en Somalia. A bordo van 26 tripulantes, 13 africanos y 13 españoles (ocho gallegos y cinco vascos).

El atunero vasco fue capturado a unas 250 millas náuticas de la costa de Somalia por cuatro piratas armados y ahora está fondeado en un lugar de la costa, al parecer cerca de la localidad de Obbia. Al barco han subido seis piratas más, según han explicado los rehenes a sus familias por teléfono.

Moratinos ha vuelto a insistir en la "necesidad de ser discretos y prudentes" para no poner en riesgo la vida de la tripulación. El titular de Exteriores ha subrayado la importancia de enviar un mensaje de "firmeza y determinación" a los piratas y de "serenidad y seguridad" a las familias de los tripulantes

El ministro ha advertido que este tipo de operaciones llevan su tiempo aunque no ha especificado de cúantos días se podría estar hablando. Francia, ha recordado, tardó una semana en liberar el yate asaltado en Somalia.

El titular de Exteriores ha explicado que "lo primero que hay que hacer es escuchar lo que quieren" porque todavía no han concretado la cantidad de dinero que piden.

Un mecanismo de control rotatorio

"La comunidad internacional tiene que reaccionar", ha explicado el ministro. España apoyará la resolución de la ONU que redactan EE.UU y Francia para autorizar la persecución de embarcaciones piratas que operan frente a la costa de Somalia, pero irá más allá.

Moratinos ha anunciado que España convocará una reunión con los países afectados por la piratería para "establecer un mecanismo de control y seguimiento rotatorio con las fuerzas militares para proteger a los pesqueros".

"Una fragata no iba a resolver el problema"

Preguntado sobre por qué el Gobierno no envió una fragata como proponía la moción del PNV aprobada en el Congreso con el voto en contra del PSOE, Moratinos ha explicado que los técnicos determinaron que "el envío de una fragata no iba a resolver el problema".

El titular de Exteriores sí que ha reconocido, en cambio, que "quizá lo que faltó" fueron reflejos para haber propuesto antes la iniciativa que ahora se va a promover.

En las próximas horas está también previsto que llegue a la zona la fragata "Méndez Nuñez" que tiene dos cometidos. Por una parte, disuadir a los piratas y por otra estar preparada por si hubiera que intervenir, aunque desde el Gobierno se descarta, de momento, un asalto violento para el rescate.

La condición básica a la hora de diseñar las actuaciones para liberar al 'Playa de Bakio' es no poner en peligro la vida de los 26 tripulantes del barco atunero.

Intervención militar

Las autoridades de Puntland, una región autónoma de Somalia, han explicado que el Ejército somalí podría intervenir para liberar al 'Playa de Bakio' como se ha hecho con un barco de Dubai que fue liberado por la fuerza el pasado martes.

Moratinos ha afirmado que no tiene constancia del envío de militares somalíes para intentar liberar el atunero vasco.