Moscú ha sufrido uno de los peores golpes en estos meses de ofensiva ucraniana, ya que la explosión de un camión al paso de un tren cargado de combustible ha provocado la destrucción del puente Kerch. Se trataba del puente que unía Rusia con la península de Crimea, un punto de vital importancia para los intereses del Kremlin.
Rusia ha confirmado que dos de los cuatro carriles para vehículos se han hundido y que la vía férrea está temporalmente inutilizada por el fuego. Se trata de un ataque con dos consecuencias graves para Putin: estratégicamente supone cortar la principal vía de suministro militar a Crimea, pero además es un golpe personal para el presidente ruso, ya que la inauguración del puente hace cuatro años significó todo un símbolo del viejo sueño de Rusia.
Guerra Ucrania - Rusia, en directo
Informa Gabriel Herrero