La Cruz Roja Internacional y autoridades ucranianas llevan varios días sin poder organizar una evacuación de civiles en Mariúpol. Los intentos de realizar un corredor humanitario fracasan y decenas de civiles continúan sin poder salir de la ciudad. Los que se arriesgan a escapar con vehículos propios llegan a la ciudad de Zaporiyia, al sur de Ucrania, donde la ONG World Central Kitchen les reparte comida caliente. El chef español José Andrés ha supervisado personalmente el reparto de ayuda a los desplazados y expresa su preocupación por las condiciones de vida que deben tener los que se quedan en Mariúpol: "La gente que llega no solo necesita alimentos, parece que quieran un abrazo, sin darte cuenta se ponen a llorar", expresa.
Informa Fran Sevilla, enviado especial