El sumario de la Operación SAGA, la instrucción policial contra la directiva de la Sociedad General de Autores de España, la SGAE no tiene desperdicio. Las investigaciones policiales revelan una posible malversación de millones de euros a través de sociedades instrumentales que servían para pagar lujosísimos gastos personales de los directivos.Según esas investigaciones con cargo indirecto a la SGAE se habrían pagado desde apartamentos, coches y viajes de lujo privados, hasta jamones o lencería.
Sabino Méndez, músico y actual portavoz de la SGAE dice que quienes como él han entrado nuevos en la Institución se temían algo así porque se había creado un tipo de Gobierno de una opacidad total. "Era una caja negra para los socios".
Había, dice, una total falta de control. En cuanto a lo que ahora pueden opinar los ciudadanos, recuerda que los socios de la SGAE son también damnificados y añade que se presentarán en el proceso como perjudicados.
Reconoce, no obstante, que será difícil que la gente vuelva a confiar en la Institución y a entender que los autores tienen derechos legítimos que no se pueden poner en duda (30/09/11).