Las cifras de contagiados van a aumentar más rápido porque se harán las pruebas a más pacientes, lo que incrementará la presión asistencial.
En las Unidades de Cuidados Intensivos es donde se vive más tensión, con casi 800 personas en estado grave, 200 más que ayer.
Pero Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, asegura que las pruebas de detección precoz no tienen por qué disparar este impacto. Espera que haya el mismo porcentaje de casos graves, pero como seguirán surgiendo casos nuevos, en cifras brutas puede haber más número de casos en la UCI.
El reparto es desigual en España. En Madrid hay más personas ingresadas porque la transmisión ha tenido focos importantes entre las personas de edad avanzada.