Boris Johnson se va antes de tiempo, no va a agotar legislatura. Es lo mismo que le ha ocurrido a otros cuantos primeros ministros del Reino Unido a lo largo de la historia: Margaret Thatcher, David Cameron, Theresa May... Recordamos con Fernando Martínez estas historias que tienen un punto en comú con la salida del propio Boris Johnson.
Los primeros ministros británicos suelen dejar el cargo por dos motivos: porque pierden las elecciones o por la rebelión interna de sus diputados, que como son elegidos directamente en sus circunscripciones, no dependen de sus líderes para ocupar estos puestos. La pérdida de popularidad y el miedo por perder los siguientes comicios han sido la razón más habitual para estas rebeliones. Puede haber pactos amistosos, como el caso del laborista Tony Blair en 2007 o puede haber enfrentamientos con los suyos, como el que tuvo Thatcher en 1991.
Pero las peores disputas dentro del partido conservador se han producido a raíz del Brexit. David Cameron, el europeísta que convocó el referéndum en 2016 para acallar a los euroescépticos, dimitió como primer ministro cuando los británicos votaron por abandonar la UE. Le sucedió Theresa May, que aprovechó las disputas internas de los brexitiers. Pero tres años después dimitió incapaz de que el Parlamento británico aprobara el acuerdo de transición de salida de la UE alcanzado con Bruselas y que era rechazado tanto por los europeístas como los sectores más duros pro Brexit. Situación que Boris Johnson aprovechó para llegar a Downing Street en 2019.