Las órdenes sí caducan y, si el agresor no comete otro delito, la medida acaba cuando lo establezca la sentencia
Hoy, el Ministerio de Igualdad reúne a su Comité de Crisis por el repunte de asesinatos machistas: cuatro en el último mes y un crimen vicario. Actualmente hay más de 100 mil casos en VioGén, aunque no tiene por qué haber siempre una orden de protección en vigor. Cira García, magistrada del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Getafe, explica a Alba Urrutia que cuando se condena a un hombre por violencia de género siempre se le prohíbe que se comunique o acerque a la víctima.
Estas órdenes suelen durar un año mínimo, pero lo habitual es que sean más largas, extendiéndose varios años y van a estar en vigor hasta que lo diga la sentencia, es decir, las órdenes sí caducan y, si el agresor no comete otro delito, la medida acaba cuando lo establezca la sentencia.