Goldman Sachs ‘ha cedido’ y va a permitir a sus trabajadores más jóvenes librar los sábados, después de que denunciaran hace unos días que hacían jornadas de más de 90 horas semanales, con menos de cinco horas de descanso. En nuestro país los trabajadores no podrían tener estas condiciones tan abusivas porque aquí el estatuto de los trabajadores fija que las jornadas se tendrán que negociar a través de los convenios colectivos y no pueden superar las 40 horas semanales. Si se hacen más, contarán como horas extra que nunca podrían superar las 80 horas al año. Además, desde mayo de 2019 es obligatorio el registro de jornada. María Pedraza, de UGT asegura que esta medida está siendo útil, La denuncia de los trabajadores de Goldman Sachs llega desde su oficina de Estados Unidos donde no hay un límite de horas en la jornada laboral.
Informa Guillermo Hernández