Los enfrentamientos en Sudán han dejado ya al menos un centenar de muertos y miles de heridos, y mantienen a las principales ciudades del país atemorizadas. Quienes los lideran combatieron un día en un mismo bando, cuando en 2021 unieron fuerzas para llevar a cabo un golpe de Estado. Por un lado, se encuentra el ejército sudanés encabezado por el general al-Burham, que es el líder del gobierno militar del país y, por el otro, están las Fuerzas de Apoyo Rápido, un grupo paramilitar liderado por uno de los hombres más ricos y poderosos de Sudán, el comandante 'Hemedti'. Tras el golpe de estado se comprometieron a llevar al país hacia una transición democrática, con las consecuentes elecciones libres, pero lo cierto es que ninguno de los dos quiere que deje de haber un gobierno militar, porque eso podría suponer un ajuste de cuentes, y ambos tienen dos intereses aún mayores: el dinero y el poder.
Informa, Alejandra Martínez.
