Vox celebra este fin de semana su Asamblea General en Vistalegre. En el acto, el partido aprobará sus nuevos estatutos, que darán más poder a Santiago Abascal. La dirección podrá sustituir hasta la mitad del Comité Ejecutivo, elegido por los afiliados eligen cada cuatro años, sin necesidad de pasar por la Asamblea. También podrán ser expulsados del partido aquellos afiliados que manifiesten discrepancias graves.
Estos nuevos estatutos han suscitado críticas internas por parte de la corriente “Vox habla”, surgida al hilo de la candidatura fallida de Carmelo González a la presidencia del partido. Denuncian que están imprimiendo al partido tintes totalitarios, y han convocado un acto paralelo para mañana en Madrid. Además, González ya ha anunciado que va a llevar a los tribunales el proceso de primarias en el que solo Abascal obtuvo los avales necesarios para concurrir.