Mineápolis ha vivido una tercera noche de saqueos e incendios a modo de protesta por la violencia de la policía contra la comunidad negra. El último caso ha sido la asfixia de George Floyd por un agente blanco. No es el primero, y es evidente la violencia racial de la policía hacia la comunidad afroamericana.
Mientras las autoridades llaman a la calma, la policía ha detenido al periodista de la CNN Omar Jiménez mientras informaba en directo. Uno de los agentes le dijo que estaba detenido y se lo llevó esposado. El hecho de que Jiménez sea de raza negra y origen hispano ha generado aún más indignación.
El presidente Donald Trump escribió en Twitter: “Cuando los saqueos empiecen los disparos también empezarán”. La red social ha ocultado el mensaje porque considera que hace apología de la violencia. Trump lejos de contribuir a apaciguar la situación, indigna aún más a los ciudadanos.