Raquel González es la responsable de Relaciones Externas de Médicos Sin Fronteras que junto con SOS Mediterranée trabajan en con el Ocean Viking en el rescate de inmigrantes que arriesgan sus vidas saliendo de Siria. En los últimos días y horas han hecho varias intervenciones y el barco está al límite de su capacidad con 251 personas, muy cerca del límite 300, pero nos dice en RNE, 20 horas fin de semana, "la situación está controlada y estable. La prioridad absoluta es el desembarco seguro de todos ellos. Europa, al margen de los gobiernos, debe establecer un mecanismo de desembarco seguro. El Open Arms lleva diez días con 121 personas a bordo y Europa mira hacia otro lado". Nos cuenta más detalles sobre la situación "la mayoría de los recatados son menores. Todos están muy traumatizado. Han vivido cosas horribles en Libia" Por ello insisten de forma contundente ese mecanismo de desembarco seguro "que atañe a toda la Unión Europea, no solo a unos estados, para que el desembarco se realice con seguridad jurídica y las personas sean reubicadas en el territorio de la unión".
Raquel González denuncia el blindaje de de los Estados y las trabas que les ponen para llevar a cabo su labor humanitaria. "Hay un Derecho Humanitario y un Derecho del Mara que obligan a socorrer. Pero además de eso hablemos de humanidad, en Libia sufren abusos, palizas... Tenemos testimonios en los que nos dicen que son conscientes de que podían perder la vida en el mar, pero prefieren eso a pasar un día más en Libia. Nosotros nunca les devolveremos a ese país". 11/08/19
