Los jefes de Estado y de Gobierno de los veintisiete se fueron a la cama sin resultado el día en que, en principio, se tenía que acabar la reunión del Consejo Europeo. La última idea que puso sobre la mesa el presidente del Consejo fue recurrir a un "freno de emergencia" en caso de que el país que haya accedido a los subsidios no cumpla con los compromisos adquiridos. Pero Holanda quiere capacidad de veto, no le parece suficiente y eso no gusta a los países del sur de Europa como España, Italia y Portugal que no quieren que nadie tenga esa capacidad. El Gobierno español acepta que haya menos dinero del fondo que se otorgue a fondo perdido y que aumenta la partida de préstamo, pero veros no. Se han marchado sin acuerdo, pero al no dar por concluida la cita, parece haber margen para la esperanza y que que este domingo logren un acuerdo aunque sea de mínimos, como a veces pasa en estas cumbres.