Gazprom ha anunciado hoy que va a cerrar aún más la mano con Alemania. Va a detener por mantenimiento otra turbina en el gasoducto Nord Stream 1 a partir del miércoles, reduciendo a la mitad sus envíos y funcionando al 20% de su capacidad. En el informativos 24 horas hablamos con Javier Blas, periodista del Bloomberg especializado en materias primas.
Afirma con rotundidad que el país europeo no tendrá gas suficiente para pasar el invierno y que debe aplicar la etapa 3 de su plan de emergencias, que requiere pedir a las grandes empresas y manufactureras alemanas que reduzcan el consumo de gas en verano para ahorrar. Señala que esto será posible pero que tendrá un coste económico muy importante, llegando a reducir su actividad económica y entrar en recesión. También deberán actuar el resto de países para ayudar de alguna manera a Alemania. "Todos los países se van a ver abocados a cierta reducción del consumo", dice Blas, que añade que esto se producirá también debido a la subida del precio. Aunque critica que Berlín no ha hecho reformas estructurales para que el efecto no sea tan grave. Sobre España, señala que lo tendrá más sencillo al tener la opción de importar gas natural licuado.
"Rusia está utilizando cualquier tipo de excusa, y si no las tiene, se las inventa, para reducir el flujo de gas a la Unión Europea", comenta el periodista, "lo que realmente está haciendo es tratar de estrangular la economía europea para forzar a sus líderes a que detengan la ayuda que se le está proporcionando a Ucrania. Es un arma económica para poner a la economía europea de rodillas", concluye.
En el caso de Argelia, que notificó una avería en el gasoducto que nos une a ese país, afirma que no es la misma situación que la alemana con Rusia pero avisa de que esto puede volver a pasar y poner en jaque el suministro en España.