Por primera vez, el Gobierno ha puesto cifras a lo que ha ocurrido en las residencias durante casi un año de crisis sanitaria. Los geriátricos han sido los lugares donde el virus ha golpeado con más fuerza. En todo este tiempo han muerto en estos centros al menos 29.408 personas, la gran mayoría durante la primera ola de la pandemia. El documento que ha publicado Sanidad deja esa cifra en el entorno de los 20.000 casos confirmados, pero reconoce a casi otros 10.000 que murieron con síntomas compatibles en 2020, aunque no con una prueba positiva. Esto significa que, si contamos únicamente los casos confirmados, la letalidad del virus en 2020 en estos centros fue del 22% durante 2020, del 17% en 2021.
Estamos hablando de centros residenciales, esto incluye a los de personas mayores y personas con discapacidad. La letra pequeña reconoce que de marzo a junio del año pasado pudo haber una importante infranotificación y que faltan datos o son parciales de muchas comunidades autónomas, así que de momento seguimos sin conocer la dimensión que ha podido tener el virus en las residencias de ancianos. Informa Isabel Jiménez.