De la entrevistada de hoy podemos decir que fue una activa militante antifranquista, abogada laboralista antes que jueza, vocal del CGPJ o alcaldesa de Madrid; también que ejerce de abuela orgullosa, que hace sus pinitos en la radio, que le gusta la ensalada de naranja con cebolla o que sus magdalenas son famosas. Manuela Carmena visita a Lara Hermoso en El Cuarto De Atrás del informativo 24 horas para hablar sobre sus múltiples vidas: "Todas me han hecho feliz, cada una tuvo su gracia y de todas recuerdo momentos fantásticos".
La exalcaldesa de Madrid se interesó por el Derecho cuando se matriculó en la universidad ya que "trataba sobre cosas que me preocupaban como la igualdad o el exceso y la falta de riqueza" y terminó en Valencia una formación que comenzó en la Universidad Complutense: "Nos parecía importante luchar por que hubiera libertad de expresión, de elegir a nuestros delegados... montamos nuestro sindicato, al margen del falangista, y en una lista de responsables aparecí yo y ahí nos echaron". Asimismo, durante su período como jueza, acabó con las comisiones ilegales en los juzgados y explica que tuvieron una "enorme ventaja" ya que "pudieron limpiar ese residuo del franquismo": "Si eso mismo lo hubiese hecho la Administración General del Estado no habríamos vivido la vergonzosa corrupción que nos ha tocado vivir durante la democracia".
Carmena también ha recordado uno de los episodios más negros que le tocó vivir: la Matanza de Atocha que se produjo el 24 de enero de 1977. "Lo recuerdo con mucha nitidez, una impresión tan profunda se queda grabada a fuego", ha explicado, "Llamábamos desde el despacho de al lado y no cogían el teléfono. Cuando llegamos allí, nos dijeron que nos marcháramos, que habían matado a nuestros compañeros... Casi no podía hablar". El atentado dejó una impronta en Manuela, quien dice que "empezó a mirar hacia atrás" para ver si la seguían: "Lógicamente tienes miedo, pro eso no te puede hacer parar tu vida. Hacía como que miraba un escaparate y esperaba para ver quién venía por detrás". "Te queda esa sensación de que tu vida puede desaparecer en un instante, que alguien puede decidir sobre tu vida", ha añadido.
La exregidora de Madrid también ha resumido su paso por la alcaldía de la capital como "la posibilidad de transformar Madrid en un lugar amplio y progresista" y niega que Pablo Iglesias fuese su socio pese a que la candidatura fuese impulsada por Podemos : "Desde el primer día dije que era independiente y así fue".