Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia, se ha mostrado preocupado por la evolución de la pandemia en toda Europa y ha celebrado ser una de las provincias españolas con menor incidencia. “Estamos muy preocupados por lo que pueda pasar a partir del 9 de mayo”, ha sostenido en 24 horas de RNE. “Uno de los municipios murcianos tiene una de las incidencias más altas de Europa, está cerrado el interior de la hostelería y cerrado perimetralmente, pero a partir del 9 de mayo no tenemos capacidad jurídica para implementar esas medidas y los municipios o comarcas en esa situación pueden convertirse en un foco de contagio”, ha explicado.
“Es imprescindible que el Gobierno se ponga trabajar para permitir a las comunidades a partir del 10 de mayo tener capacidad suficiente para tomar decisiones que frenen contagios”, ha insistido y ha negado que el Consejo Interterritorial tenga capacidad para implementar medidas: “Desde que se envía la decisión a los tribunales y se resuelve, el virus se expande”. “Como administración central y europea, en el plan de administración no estamos dando la talla”, ha mantenido el presidente murciano que ha destacado la importancia de ponerse la vacuna y convencer a “todos” de que la vacuna es “fiable, segura y la solución”.
“En la Región de Murcia no ha habido transfuguismo”, ha mantenido López Miras. También ha hecho hincapié en que los miembros del Gobierno regional están “unidos por una apuesta por la libertad y por la estabilidad del Gobierno en el momento más necesario” y ha denunciado que, “de la manera más inmoral y más ruin”, durante la tercera ola, “en los despachos de Moncloa, PSOE y Ciudadanos se repartían la región y la alcaldía de Murcia”.