Durante 2020 comenzaron a proliferar por zonas de la llamada España vaciada macrogranjas de cerdos que, por un lado, daban empleo a los habitantes de la zona, pero por otro, como denuncian plataformas vecinales, han contribuido a empeorar la calidad de vida de los pueblos y las comarcas donde están instaladas: contaminación de suelos y aguas, malos olores y una aceleración de la despoblación.
Inma Lozano, portavoz de la Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial ha sostenido que más que el olor, les preocupa el agua. "Al principio te lo pintan muy bonito, pero tras acceder al proyecto ves que no, que no hay dinamización. Investigas y descubres que los pueblos con explotaciones de este tipo no fijan población", ha explicado en 24 horas RNE. Entre los principales problemas que te encuentras, ha enumerado que "te comen las moscas", los olores o los niveles de nitratos en el agua del grifo. "Los promotores hablan de abono, pero no se puede gestionar de la manera adecuada que pide la tierra", ha lamentado y ha añadido que finalmente, ese purín acaba en los acuíferos. Lozano ha explicado que todas las poblaciones en las que se ubican este tipo de explotaciones comparten características: ayuntamientos pequeños, con población envejecida, con pocas herramientas y escaso acceso a técnicos que "acaban desbordados con la normativa y las herramientas para frenar el proyecto". "Vienen a forrarse con el negocio y nos prometen que nos van a dinamizar y crear empleo, pero el futuro que nos espera es la devaluación de los terrenos y las casas", ha destacado y ha comentado que piden una moratoria, que se dejen de dar licencias hasta que no se haga una legislación más restrictiva y acorde con el modelo. "Si esos animales no ven la luz del sol, ¿por qué no instalan las macrogranjas al lado de las ciudades?", ha preguntado la portavoz de la Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial.
Miguel Ángel Higuera, director de la Asociación Nacional de Productores de Ganado Porcino, ha defendido que las más de 86.000 granjas de cerdos del país dan empleo a 400.000 familias de forma directa e indirecta, la mayor parte en zonas rurales, por lo que son esenciales para luchar contra la despoblación y achaca las protestas a grupos animalistas. "El sector porcino es fundamental, por economía y empleo, para la viabilidad del pueblo", ha destacado en 24 horas RNE y ha sostenido que "los cerdos se crían en España de toda la vida, ahora se hace de una manera mejor y más controlada". También ha explicado el proceso de instalación, los requisitos exigidos para las infraestructuras y el control a las cantidades de purín que se aportan al suelo.