Susana Pardo Sánchez, del comité de organización de la huelga de MIR, y Sheila Justo, presidenta del sector MIR de AMYTS (Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid), han denunciado en 24 horas de Radio Nacional la situación de los médicos residentes en esta época de pandemia: "Ha supuesto un antes y un después para todo el personal sanitario, pero especialmente para los residentes: acabamos de empezar nuestro proceso de formación y hemos tenido que realizar funciones por encima de nuestro conocimiento". "A muchas CC.AA. les está compensando, los hospitales son una olla a presión y nosotros estamos agotados", denuncia Sánchez, que reconoce que varias autonomías ya se han puesto en contacto con ellas, aunque la semana que viene irán a la huelga en Valencia.
Por su parte, Justo indica que el personal MIR es "en formación, contratado con el objetivo de obtener sus títulos como especialista" y, en consecuencia de ello, "personal instrumental, aunque se les haya puesto unos mínimos parecidos a los de la plantilla estructural". "El trabajo de un MIR debe ser supervisado y el real decreto que lo regula (183/2008) no se ajusta a la realidad. Hay que apostar por un sistema en el que el residente se va formando progresivamente", ha añadido.
Asimismo, Susana Pardo explica que se ha normalizado "no respetar unos derechos laborales básicos" y que las tareas de los MIR "dependen de los servicios en los que estén los residentes": "Desde que no paguen las guardias localizadas (no están reconocidas para residentes) a trabajar gratis en quirófanos de adjuntos en clínicas privadas". "Solo queremos que se cumpla la ley", han resumido, "Que se quiera mejorar posteriormente el Real Decreto sería perfecto, pero lo que estamos solicitando son competencias que ya tienen las comunidades, como el gobierno regional de Madrid".
