El líder del autodenominado Estado Islámido, Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshim murió en una operación antiterrorista de los Estados Unidos en el noroeste de Siria. En una comparecencia desde la Casa Blanca, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha explicado que, cuando la operación de comando entró en el edificio en el que se encontraba, al-Qurayshim hizo estallar una potente bomba con la que se inmoló y mató a varios miembros de su familia. Entre los fallecidos, hay seis niños y cuatro mujeres. Con esta justificación, Biden se desmarca de la polémica que se había generado al salir a la luz que la intervención militar se había saldado con la muerte de varios civiles.
Al-Qurayshim había sustituido como líder del Estado Islámico, el autoproclamado emir Abu Bakr al-Baghdadi, quién también murió en una operación militar estadounidense en octubre de 2019 en el norte de Siria. Aunque Estados Unidos retiró la mayor parte de lasfuerzas militares de territorio sirio, dejó sobre el terreno un pequeño contingente que colabora con el grupo de las milicias kurdo-sirias, que fueros sus aliadas durante la guerra contra el Estado Islámico.
Informa Fran Sevilla, corresponsal en Washington