La pandemia puso a prueba a todo el país, también a las Fuerzas Armadas. Obligó a llevar a cabo la mayor operación desplegada en tiempos de paz, una misión que duró más de tres meses y se bautizó como la 'Operación Balmis'. Durante 98 días, casi 189.000 militares españoles lucharon contra un enemigo desconocido. Se trataba de un virus, el causante de la Covid-19. Realizaron un total de 20.000 intervenciones en 2.300 poblaciones, incluidas labores de desinfección, intervención en residencias y preparación de una veintena de hospitales de campaña.
El teniente general Carlos Palacios, fue el jefe del mando del componente terrestre, reconoce que fueron momentos duros, pero que la emergencia apremiaba: "Nunca se está preparado psicológicamente para hacer frente a una pandemia. Había que ponerse a conducir la operación y desplegar todos los militares en apoyo a la sociedad". El sargento primero, Álvaro Casermeiro, de la Agrupación de Infantería de Marina, estaba al frente de uno de los grupos que llevaron a cabo miles de desinfecciones: "El momento en el que nos dijeron que íbamos a participar en la misión fue un momento muy bonito. Sentía que podíamos aportar algo", recuerda.
Un reportaje de Mar Lupión.