Quique Bassat, epidemiólogo e investigador de ICREA del ISGLOBAL, ha señalado que no hay suficiente información para relacionar la vacuna de AstraZeneca con los casos de trombos tras la inoculación de al menos una dosis. “Cualquier efecto adverso debe investigarse, pero hay que plantearse primero si el número de casos que ha aparecido de este evento adverso en los 17 millones de personas vacunadas es más frecuente de lo esperable en la población normal”, ha explicado en 24 horas de RNE. El inmunólogo ha opinado que los trombos son un “evento adverso frecuente” y ha vaticinado que no se encontrará una relación de causa consecuencia.
“Paralizar a vacunación con AstraZeneca es una medida exagerada, tomada por presión social más que por necesidad científica”, ha manifestado Bassat que ha considerado que España “va tarde” con las dosis administradas “por los problemas de suministro y un inicio de vacunación lleno de obstáculos”. También ha calificado que Europa “ha suspendido” con el plan de vacunación: “Ha faltado planificación y transparencia y no se han establecido unas reglas claras”. Ha destacado la “evidencia” de que habrá una cuarta ola: “La pregunta es cuándo y con qué intensidad, la ventaja es que nuestra población más vulnerable empieza a estar protegida”.