Estados Unidos quiere restringir el llamado 'Turismo de maternidad', esa práctica por la cual algunas mujeres viajan al país norteamericano en la recta final de su embarazo para dar a luz allí y que su bebé obtuviera la ciudadanía estadounidense. Desde mañana, las mujeres no estadounidenses que quieran viajar allí deben probar que tienen otro tipo de razones para hacerlo, por ejemplo de tipo médico, pero que no implique parto.
Ha habido personas que lo han utilizado pensando que tener un hijo estadounidense da algún tipo de derecho de residencia a los padres, lo que en ningún caso es correcto; y gente adinerada que lo ha hecho simplemente para que sus hijos tuvieran doble pasaporte y gozaran de ciertos privilegios de cara por ejemplo a una futura educación o residencia en el país.