Cuando contemplamos algo y reconocemos bello lo que es "bello", se establece entonces la "fealdad" (25/09/10).
Cuando contemplamos algo y reconocemos bello lo que es "bello", se establece entonces la "fealdad". Cuando contemplamos algo y reconocemos bueno lo que es "bueno, se establece entonces la "maldad". Y aquí reside el origen recíproco de todas las cosas. El ser y el no-ser se crean mutuamente; lo difícil y lo fácil se complementan entre sí; lo largo y lo corto se definen mutuamente; lo alto y lo bajo se completan entre sí; el sonido y el silencio se armonizan mutuamente; el antes y el después se suceden entre sí. Es la ley de la Naturaleza. Por eso, el sabio Maestro obra sin actuar y enseña sin decir. Todos los seres se renuevan sin cesar. Las cosas surgen y él deja que vengan. Las cosas desaparecen y él deja que partan. El Maestro tiene, pero no posee. Actúa, mas no espera nada. Cumple su obra, pero no reclama su mérito. Y precisamente porque no lo reclama, su mérito es imperecedero (Lao Tse: Tao Te Ching - El libro del sendero , siglo VI antes de Cristo) (25/09/10).