Eusebio Cimorra, vástago de una familia burguesa madrileña, es uno de esos profesionales españoles a los que el exilio convirtió en un perfecto desconocido para sus compatriotas, excepto para aquellos que, venciendo las interferencias, escuchaban Radio Moscú. Allí era, Jorge Olivares, un seudónimo obligado para proteger a aquellos de su familia que residían en la España de Franco. Pese a sus dos libros publicados, El sol sale de noche, editado en la URSS, sobre los guerrilleros españoles enrolados en las filas soviéticas durante la 2º Guerra Mundial y Un mito llamado Pasionaria, el exilio probablemente frustró en Cimorra una carrera litería o ensayística en España. Para Cimorra el exilio fue, como expresó Max Aub en La gallina ciega, un camino sin retorno hacia el olvido, pese a que, al filo de los 70 años de edad, reinició su vida profesional en España fundando la Agencia Internacional de Noticias, conocida por sus siglas ANI, y colaboró en distintos medios, como el semanario apoyado por el PCE, de corta vida, La Calle. Cimorra nacido en 1908, falleció en 2007, a los 98 años, en Madrid.
Cimorra, como Buñuel o como Lorca, fue uno de esos jóvenes republicanos nacidos en el seno de familias con dinero que pudiendo tener unas vidas de privilegio en la España de aquel tiempo, se desclasaron, y se comprometieron a fondo con la República, lo acabó significando para ellos el exilio o la muerte. A mitad de los años 20 había entrado Cimorra en la prensa comunista gracias a Jesús Hernández y en 1940, en Moscú, de nuevo con la ayuda de Hernández, Cimorra entrará a trabajar en las emisiones de onda corta en español de Radio Moscú y allí permaneció hasta 1977.
Conversamos con Boris Cimorra hijo de Eusebio y autor del libro sobre su padre, La voz que venía del frío que claramente alude al marco histórico en que trabajó, el de la guerra fría. Radio Moscú inició sus emisiones en lenguas extranjeras en 1929, y en español a partir de 1932. Tras la desaparición de la URSS en 1991, pasó a llamarse La Voz de Rusia.
Este programa ofrece una aproximación a las etapas cruciales de la vida de Eusebio Cimorra, su llegada al periodismo escrito en el Madrid de los años 30, y su llegada al medio radiofónico en Moscú en 1940, en las voces de Boris y Eusebio Cimorra.