920. Biblioteca Pública - Antonio Fuentes Ruiz rescata en La huella borrada la vida de Horacio Hermoso Araujo, último alcalde republicano de Sevilla, asesinado en el 36
(Entrevista de Manuel Sollo). Horacio Hermoso Araujo, alcalde republicano de Sevilla, de 36 años, fue fusilado en las tapias del cementerio el 29 de septiembre de 1936, al inicio de la guerra civil, en una ciudad bajo el terror del general golpista Queipo de Llano. Su cuerpo nunca ha sido encontrado, ni siquiera se sabe en qué fosa común pudo ser enterrado. A rescatar del olvido su vida ha dedicado cinco años de investigación el periodista Antonio Fuentes Ruiz. El resultado es la novela La huella borrada (Plaza & Janés). El autor conoció la biografía de Hermoso Araujo a través de su hijo, quien con noventa años contó la tragedia familiar en un instituto sevillano. Contrastó su memoria con la de otros supervivientes e historiadores, indagó en archivos, hemerotecas, libros. Así reconstruyó la historia del regidor de Izquierda Republicana, que llegó al cargo por azar y que sólo pudo gobernar cinco meses, apoyado por los partidos del Frente Popular. Contable con fama de buena persona, la mayor osadía de Horacio Hermoso fue conseguir que se celebrara con normalidad la Semana Santa de abril de 1936, frente al boicot del cardenal Eustaquio Ilundain y las élites y clases cómodas de Sevilla. Tal vez ese desafío le costó la vida.