Julia Navarro, "Historia de un canalla"

¿Se puede representar la maldad en estado puro? ¿Hay alguien, algún ser humano, capaz de manipular, someter y destruir a sus semejantes por turbios intereses o mero placer? La periodista y escritora Julia Navarro ha modelado a ese personaje en su nueva novela, "Historia de un canalla" (Plaza y Janés). Su protagonista es Thomas Spencer, un exitoso neoyorquino que temiendo morir nos cuenta en primera persona los siniestros avatares de su vida y el reguero de víctimas, al tiempo que imagina qué habría sucedido si se hubiese portado como un tipo decente: El desprecio desde la infancia por su madre de origen hispano, la quebrada proximidad a su familia anglosajona, su enfermiza y violenta relación con las mujeres, su meteórica carrera en el mundo de la publicidad y la asesoría política. Desde los años 80 a la actualidad, asistimos también al despiadado ejercicio del poder, a la extrema manipulación de los grandes consorcios financieros y empresariales, apoyados en agencias de comunicación, publicistas y periodistas sin escrúpulos, hasta la explosión de la crisis en el declive de un Thomas Spencer que concluye: "No dejo de preguntarme si habría sido mejor esa vida que no he querido vivir porque he preferido ser un canalla".