Biblioteca Pública - "Malandar". Eduardo Mendicutti canta a la amistad entre el íntimo coto de Doñana y el Madrid transgresor de la lucha por los derechos gais
(Entrevista de Manuel Sollo). A punto de cumplir 70 años, Eduardo Mendicutti regresa a los escenarios de su infancia y adolescencia, La Algaida ficticia que nos remite a Sanlúcar de Barrameda, la localidad gaditana en que nació. En “Malandar” (Tusquets) retoma el tono íntimo y ligeramente autobiográfico de “El palomo cojo”, que fue finalista del Premio Nacional de Narrativa en 1991. Ahora reúne a tres amigos, Toni, Miguel y Elena, que, pese a diversos altibajos, mantendrán férreos vínculos desde los ocho a los sesenta años. Su referencia será siempre la playa del coto de Doñana, un lugar casi virgen donde sueñan con construirse una casa, una cabaña, un hogar. Mientras Toni y Elena se casan y permanecen en el pueblo, Miguel, protagonista y narrador, estudiará y hará carrera en Madrid como periodista. En un relato salpicado de divertidos encuentros sexuales, participará en la lucha por los derechos de los gais entre los estertores de la dictadura y la aprobación del matrimonio homosexual. El reencuentro final del trío de amigos le permitirá hacer cuentas de lo que fue y lo que no pudo ser, de lo que perdieron y de lo que aprovecharon. Aquí nos lo cuenta Mendicutti, con sus expresiones populares y su buen humor habitual.