Biblioteca Pública - Samanta Schweblin novela en "Kentukis" los límites del uso de la tecnología, la exposición de la intimidad y los riesgos del voyerismo
(Entrevista de Manuel Sollo). Gente que compra unos pequeños artilugios tecnológicos, peluches con forma de animales, que captan todos los movimientos en la vivienda. Gente desconocida de cualquier parte del mundo que controla el dispositivo y recibe esas imágenes en su ordenador. Lo cuenta la escritora argentina Samanta Schweblin en su nueva novela, "Kentukis" (Literatura Random House), que así se llama el aparato. Todos pagan; unos, por exponer su intimidad, otros, por observarla desde un voyerismo no siempre inocente. No es ciencia ficción ni distopía, sino usos posibles y cotidianos de la tecnología actual, que abre la reflexión consiguiente sobre los límites éticos y morales de esos vínculos. Porque del fondo de estas conexiones emergen conflictos de pareja, violencia de género, trata de mujeres, dramas de refugiados y chantajes con la posible difusión de materiales privados. De todo ello hablamos con esta alabada y galardonada autora bonaerense, residente en Berlín.
