894.- Biblioteca Pública - Eider Rodríguez narra en Material de construcción su vida con un padre alcohólico, marcada por la vergüenza y la violencia de la Rentería de los ochenta
(Entrevista de Manuel Sollo). ¿Cómo novelar una experiencia autobiográfica sobre la vida compartida con un padre alcohólico? ¿Cómo regresar a aquel tiempo de la niñez y la adolescencia, reflexionar sobre el origen de la enfermedad y contar su incidencia en la familia durante casi cuarenta años? A estas y otras preguntas se ha enfrentado Eider Rodríguez en su primera novela, Material de construcción (Random House), escrita como toda su obra de narrativa breve en euskera y traducida por Lander Garro y la propia escritora. En 2018, su padre sufrió un ictus. Ese fue el detonante para escribir un diario del presente y reencontrarse con esa relación afectiva que estuvo marcada por la vergüenza, la culpa y el silencio. Entrelazada con lo íntimo, la realidad de un pueblo, la Rentería de los años 80 y 90, asolado por los efectos del desarrollismo industrial y una violencia extrema, la heroína, el terrorismo de ETA, la represión policial. Ganadora del Premio 111 Akademia, el relato cuestiona también el lenguaje y su capacidad de expresar, la traducción como conflicto idiomático. Lo que pudo ser un ajuste de cuentas la autora lo tornó en una carta de amor, dura y dolorosa pero también y sobre todo sanadora.