Biblioteca Pública - El poeta sevillano José María Jurado añora en "Herbario de sombras" la gran cultura europea, entre lo culto y lo popular, la elegía y la esperanza
(Entrevista de Manuel Sollo). La poesía aspira a preservar el instante. Lo anuncia el poeta en una acotación inicial. Y entre el tiempo ido, la memoria y la aspiración sensitiva de la belleza, emergen un mundo de ayer, el invernadero donde la semilla agarra y crece, las voces de la tribu, telúricas y germinales, románticas canciones alemanas, para, al fin, cerrar la casa entre lo elegíaco y la esperanza. El poeta atiende por José María Jurado García-Posada y sus versos se agavillan en "Herbario de sombras" (Los Papeles del Sitio). El mimo de la edición nos revela su pasión por Juan Ramón Jiménez; sus poemas, la cadencia de formas clásicas que expresan la añoranza por aquella gran cultura europea y cristiana, el temblor emocional de los cantos populares, el sentimiento, ya sereno, por la ausencia del padre. Sevillano de 1974, ingeniero de telecomunicaciones, Jurado pertenece a una familia de raigambre literaria, es sobrino del reputado crítico Miguel García-Posada, ya fallecido. Este volumen es su sexto poemario.