La medida afecta a los 213 hogares y clubes que hay en la Comunidad de Madrid. De ellos, 10 son privados y los 203 restantes, de las administraciones regional y local. También se cerrarán los servicios de convivencia familiar y social de titularidad privada. La suspensión se establece por un mes.
La Comunidad de Madrid explica que esta decisión se ha tomado porque los usuarios de los centros de mayores constituyen una población especialmente vulnerable al coronavirus, considerando que existe un riesgo "inminente" y "extraordinario" para la salud pública.
La medida afecta a los centros de mayores dedicados a promover el envejecimiento activo y la prevención de la dependencia donde los usuarios pueden acudir a realizar diversas actividades socioculturales y de entretenimiento.
Informa Graciela García.