La curva de los delitos se invierte en Italia. Después de tres años registrando un descenso, en 2011 se produjo un incremento del 5¿4% en el número de infracciones contra la ley que se produjeron en Italia.
Los atracos aumentaron el 24% en todo el país mientras los robos en las casas se incrementaron el 21%.
Es el efecto de la crisis sobre el delito según datos del Ministerio del Interior recopilados por Il Sole 24 Ore. En total 2.760.000 frente a los 2. 620.000 del año anterior.
Por ciudades es Milán la más peligrosa de Italia. Roma y Nápoles la siguen en esta turbia estadística del delito.
Para luchar contra esta tendencia se necesitan más medios policiales pero las fuerzas de seguridad no lo tienen fácil. En la última revisión del gasto se prevé un recorte de 1.500 millones de euros en los gastos de policía. De los 2.000 agentes que se jubilan este año solo 400 serán remplazados.
Más paro, menos trabajo y menos policía suponen un caldo de cultivo para los infractores. La contención del gasto dispara el miedo y la inseguridad. Gobernar no es solo una cuestión de números.