La Justicia Belga ha rechazado la demanda que Puigdemont y los cuatro exconsejeros huidos habían presentado contra el juez del Supremo, Pablo Llarena. Los cinco acusaban al magistrado de "vulnerar su presunción de inocencia por decir que los presos del procés no eran presos políticos" y reclamaban a Llarena una reclamación simbólica de cinco euros.
El Tribunal Civil de Bruselas archiva la demanda, presentada en agosto de 2018, tras considerar que Pablo Llarena hizo esas manifestaciones "en su condición de juez" por lo que se ampara en "la inmunidad de jurisdicción, incompatible con el espacio común de justicia de la Unión Europea". Las defensas de los fugados han anunciado que recurrirán la decisión ante el Tribunal Supremo belga.
Informa Teresa Coto.
