Primer lunes sin Krahe

Ayer domingo Javier Krahe se nos fue y nos dejó huérfanos del máximo jugador de palabras, de ironía templada y sonriente; se nos ha ido este ingenio madrileño ejemplar, de mirada azul inteligente, continuador muy a su manera de George Brassens y Leonard Cohen. De La Mandrágora a Zahara de los Atunes, escribió su Historia con canciones de versos tan ocurrentes y autobiográficos como: “Y hoy que pensaba, descubriendo algún enredo,/ir con mis letras tras la gloria de Cervantes/héteme aquí tras la glorieta de Quevedo” o aquella otra tan pictórica, tan grecogoyesca “Soy el caballero de la mano en el pecho de la maja desnuda”. Las canciones de Javier Krahe alegran los lunes o cualquier otro día jueves