Durante las próximas semanas, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, retomará las negociaciones para alcanzar un acuerdo sobre el presupuesto para el periodo 2014-2020, al que los mandatarios de la Unión no llegaron la semana pasada. Los países contribuyentes siguen apostando por un recorte aún mayor de los 80 mil millones apuntados por el Consejo, mientras España, Francia e Irlanda han hecho frente común para conseguir seis mil millones de euros más.
El 'banco malo' tiene nombre: SAREB, Sociedad deGestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria. También tendrá presidenta: será Belén Romana, exdirectora general del Tesoro y persona de confianza del ministro de Economía, Luis de Guindos.
El principal objetivo de este tipo de bancos es el de proteger el sector bancario y de esta manera, reactivar la situación económica actual de España, porque, en teoría, en el caso de que los bancos se libren de todos aquellos créditos tóxicos dispondrían de liquidez que, a su vez, la invertirían en nuevos créditos a personas solventes, especialmente empresarios, y de esta manera, se conseguiría potenciar las empresas con el consiguiente posible descenso del paro, uno de los problemas más importantes actualmente en España.
De las funciones de este 'banco malo'; de su repercusión en el sector inmobiliario; de su influencia en la fluidez del crédito y de su coste para los contribuyentes hablamos con Luis Suárez, jefe de Comunicación de AUSBANC, la Asociación de usuarios de servicios bancarios.