Pero no sólo de forma sino de fondo. Una reforma que comience en las dependencias a las que debe acudir la mujer a denunciar que ha sido víctima de malos tratos. Una reforma que afecte a los funcionarios que van a atenderla y permita a estos obtener la formación que necesitan para acometer la tarea que tienen encomendada. Una reforma que tenga en consideración la situación de las víctimas y la necesidad de asesoramiento por parte de estas... que aborde los problemas del turno de oficio, de los juicios rápidos...
Son sólo algunos de los aspectos que debería acometer la reforma de la Ley contra la Violencia de Género que están preparando los Ministerios de Sanidad, de Interior y Justicia. Es la opinión de Amalia Fernández, abogada y portavoz de la Asociación de Mujeres Juristas Themis, quien participa en el programa y pone de manifiesto cómo, después de casi 10 años, esta ley ha demostrado que adolece de grandes carencias, que unidas a la falta de recursos están permitiendo que el número de denuncias sea menor cada vez, al tiempo que aumentan los asesinatos machistas.