Esta medianoche finaliza el plazo para el pago de la deuda a los bonistas que aceptaron el canje de deuda con Argentina. El ministro de economía Axel Kicillof salía para Nueva York nada más terminar la cumbre del Mercosur en Caracas, Venezuela, donde la delegación del Gobierno argentino, desde la media mañana del martes, negociaba la concesión del stay - la medida cautelar- con el mediador nombrado por el juez Thomas Griesa, Daniel Pollack. En la cumbre del Mercosur la presidenta de la nación, Cristina Fernández, negaba la posibilidad de hablar de default, al afirmar que eso ocurre cuando no se paga, y añadía, que no es el caso de Argentina porque el dinero está depositado para que cobren los acreedores. Bonistas europeos han solicitado al juez neoyorquino que conceda la cautelar, para después poder negociar la cláusula Rufo, que caduca el próximo 31 de diciembre, la que más miedo provoca en el ejecutivo argentino.
Los presidentes latinoamericanos integrados en el Mercado Común del Sur se plantean la creación de una gran zona económica integrada y las alianzas de los distintos bloques de la región como el Caricom, la Alianza del Pacífico, el Alba, Petrocaribe y también un acuerdo con la Unión Europea, aunque sus expectativas de crecimiento económico las están enfocando hacia Rusia y China.
Estados Unidos niega que exista una nueva guerra fría con Rusia, mientras aprueba un nuevo paquete de sanciones que incluye sectores energéticos y de armamento contra Rusia, lo mismo que ha hecho la Unión Europea al considerar que el presidente ruso, Vladímir Putin, hace oídos sordos y sigue apoyando a los prorrusos de Ucrania.
El secretario de Estado Norteamericano, John Kerry, afirma que la solución al conflicto de Gaza pasa por el desarme de Hamás y de todos los grupos "terroristas", mientras asegura que seguirá trabajando por alcanzar un alto al fuego, que se resiste, con Israel, los socios de la zona y la comunidad internacional. Este martes ha sido uno de los más sangrientos desde que se inició la operación militar hebrea en la Franja de Gaza el pasado 8 de julio.
