El fuerte terremoto que ha sacudido Ecuador de 7,8 en la escala Ritchter ha afectado la costa central y deja, de momento, al menos 77 muertos y 588 heridos. El gobierno ha declarado el estado de excepción en seis provincias.
El vicepresidente Jorge Glas, en una comparecencia ante los medios de comunicación, dijo que las personas a las que se recomendó abandonar sus viviendas y buscar refugio en un lugar elevado como precaución ante un posible aumento del oleaje, "pueden regresar a sus casas", ya que "no existe alerta de tsunami".
El vicepresidente dijo que el terremoto fue el más fuerte que ha sacudido al país desde 1979 y advirtió de que se prevé que la cifra de fallecidos "va, desgraciadamente, a aumentar en las próximas horas".
Glas reveló que se han habilitado 300 millones de dólares de fondos de contingencia y se ha decidido el envío de bomberos a la Provincia de Manabí y en particular al cantón de Pedernales, en esa provincia. También informó de que se dispuso el despliegue de 3.500 policías que se distribuirán por las provincias de Manabí, Esmeraldas, Guayas y Santa Elena.
El presidente Correa, de visita en el Vaticano, está regresando al país y ha pedido calma a la población. 17/04/16