Con ocasión del centenario del nacimiento del dramaturgo y académico Antonio Buero Vallejo, el 29 de septiembre de 2016, Documentos RNE recupera su vida y obra con la reemisión del programa que Fin de Siglo le dedicó en octubre de 1999, seis meses antes de su fallecimiento, el 28 de abril del año 2000.
Nacido en Guadalajara, Buero Vallejo tendrá desde niño afición a la lectura impulsada por el amor a los libros que vivió dentro de su familia, a la par desarrollará una gran sensibilidad artística que abarcaría también a la pintura y la música, algo que le acompañará durante toda su vida. Desde joven asiste con frecuencia al teatro, gracias a la gran afición de su padre, y empieza a escribir sus primeras obras. Ya se empezaba a notar su espíritu de compromiso y clarividencia fomentado por el ambiente de equilibrio y tolerancia creado por sus padres.
La Guerra Civil le provocará una gran conmoción ya que su padre, capitán del ejército, sería fusilado por el bando republicano, mientras que él tomaría partido contra la sublevación franquista. A consecuencia de ello sería encarcelado y condenado a pena de muerte aunque posteriormente fuera conmutada por la de treinta años de cárcel. En la galería de condenados a muerte coincidirá con Miguel Hernández al que le realizará su famoso retrato. Tras varias reducciones de condena sale en libertad condicional en marzo de 1946. Desde ese momento se dedicará de lleno a la escritura e inicia una carrera que abarcará toda la segunda mitad del siglo XX y que será llamada a renovar el lenguaje teatral.
Inmerso en el desgarro de su época, Buero Vallejo desarrolla un teatro trágico en el que la historia y el conflicto individual se entrelazan buscando un sentido ético a la existencia. Sus personajes se abrazan a la esperanza buscando una luz que alumbre sus vidas hacia un futuro mejor y más certero. La realidad social sirve de trasfondo a una búsqueda de la verdad, de una verdad sincera y comprometida no exenta de dureza. El universo íntimo de sus personajes, sus emociones, temores y esperanzas, se expresa a través de un lenguaje lleno de simbolismo. La luz y la ceguera serán símbolos destacados que le servirán para penetrar en la profundidad de sus personajes en obras como la Ardiente Oscuridad o el Concierto de San Ovidio.
Su obra está jalonada de grandes títulos y de importantes galardones, entre los que destacan el Premio Lope de Vega en 1949 por Historia de una Escalera, el Premio Nacional de Teatro en cuatro ocasiones con obras como Hoy es Fiesta o Un Soñador para un Pueblo, el Premio Miguel de Cervantes en 1986 o el Premio Nacional de las Letras Españolas en 1996, así como diversas ediciones del Premio El Espectador y La Crítica para obras como El Tragaluz, El Sueño de la Razón o La Fundación.
El documental, con guión de Javier Lostalé, ofrece una visión del insigne dramaturgo a través de su propia palabra. En una emotiva entrevista realizada un año antes de su fallecimiento, en compañía de su esposa, la actriz Victoria Rodríguez, Buero Vallejo muestra su cara más íntima y sentimental, y ambos recuerdan con dolor la muerte de su hijo Enrique en 1986. Además cuenta con testimonios de importantes figuras de las letras y la escena como Laín Entralgo, Asunción Sancho, María Jesús Valdés, Jesús Puente, Gustavo Pérez Puig, Juan Carlos Pérez de la Fuente y Luis Iglesias Feijoo. Asimismo se muestran fragmentos destacados de sus obras en la voz de grandes intérpretes de la escena como Adolfo Marsillach, José María Rodero, Lola Cardona o José Bódalo.