En enero de 1920, en Estados Unidos, se establecía la llamada Ley Seca. Después de décadas intentando implantarla, finalmente, los grupos prohibicionistas lograron que saliera adelante, a través de una enmienda introducida previamente en la Constitución que prohibía la fabricación, importación, transporte y venta de licores alcohólicos en todo el país.
El objetivo aparente de los grupos que defendían la Prohibición era acabar con un mal endémico del país; el alto consumo de alcohol afectaba tanto a la productividad de las empresas como a la vida familiar. Sin embargo, esta medida escondía otros problemas de fondo como el enfrentamiento de dos modelos de vida y de cultura, el tradicional de la América rural y el de la naciente y heterogénea América urbana. Subyacía, también, la desconfianza de los nativos hacia las oleadas de inmigrantes que, en ese momento, arriban al país americano y que amenazaban con acabar con los valores de la cultura blanca, protestante y puritana.
Pero la puesta en vigor de la llamada Ley Volstead, en honor del congresista que la promovió, trajo consecuencias indeseables. En primer lugar, convirtió a la quinta industria del país en un negocio ilegal que terminó cayendo en manos de mafias y gánsteres. Proliferaron los garitos clandestinos y el contrabando, y las diversas familias del hampa lucharon entre sí para hacerse con la mayor tajada posible del negocio. Esto trajo consigo una ola de violencia en ciudades como Chicago o Nueva York, y la emergencia de figuras del crimen tan destacadas como Johnny Torrio o Al Capone. Además, la Prohibición propició la corrupción política y policial en todos los estamentos de la vida pública como nunca antes se había conocido en los Estados Unidos.
Todos estos efectos adversos motivaron una creciente oposición a la ley. Después de casi catorce años de su aplicación, tras la victoria electoral de Franklin D. Roosevelt en 1932, la Ley Seca fue derogada gracias a una nueva enmienda constitucional que anulaba la Prohibición. Sin embargo, sus consecuencias se mantuvieron durante décadas.
Con guión de Mamen del Cerro, Documentos RNE desarrolla los motivos de su génesis, su controvertida aplicación y sus resultados. Para ello contamos con la aportación de tres grandes especialistas en la Historia de Estados Unidos; Aurora Bosch, catedrática de Historia Contemporánea de la Universidad de Valencia y autora de, Historia de Estados Unidos, 1776-1945; José Antonio Montero Jiménez, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad Complutense de Madrid y experto en Política Exterior de Estados Unidos; y Pablo León, profesor de Historia y Relaciones Internacionales en el Centro Universitario de la Defensa de Zaragoza.