El periodismo como contrapoder es una máxima que se hizo realidad en Oriana Fallaci. Mujer fuerte, con la energía necesaria para ejercer un periodismo libre e independiente, Fallaci es considerada un referente y la primera reportera global.
Su carrera está marcada por una mezcla de olfato periodístico y tenacidad. Alcanzó fama gracias a sus entrevistas a las figuras de Hollywood y más tarde a líderes mundiales como Indira Gandhi, Yasir Arafat, Golda Meir, Willy Brandt, Henry Kissinger, el Sha de Persia Reza Pahleví, Muamar el Gadafi o el ayatolá Jomeiní. En ellas pretendía buscar la verdad que se escondía tras el personaje y no eludía la lucha dialéctica.
Fallaci no ocultaba su opinión y, debido a su combativo carácter, se situó en el centro de muchas polémicas, pero era seguida con interés y sus relatos se convertían rápidamente en best sellers como Penélope en guerra o Si el sol muere.
Criticó la dictadura de Franco y las de América Latina y vivió los conflictos más destacados de su tiempo, como la guerra de Vietnam o las protestas estudiantiles de México en 1968, donde cayó herida por tres disparos.
Fallaci recorrió el mundo dejando constancia de la situación de la mujer y de sus derechos. Esto le llevó a situarse frente al Islam. En su libro Inshallah, inspirado en la matanza del atentado de Beirut de 1983, agudiza su anti islamismo. Y tras los atentados del 11S publicó una serie de artículos donde no discriminaba entre fanáticos y moderados que le valieron numerosas críticas.
El documental, con la firma de Modesta Cruz, desgrana la fuerte personalidad de Oriana Fallaci y entra en su fondo humano, a pesar de su dura apariencia. Lo hace con la ayuda de la directora del Instituto Italiano de Cultura de Madrid, María Luisa Pappalardo, y de los profesores Francisco Cabezuelo y Carolina Abellán. Asimismo, el programa recupera del Archivo de RTVE la voz de la propia Oriana Fallaci.