Vamos en el barco mientras sale el sol... Escuchando las historias de la almadraba que se cuentan a bordo. Son muchas, hay mucha literatura sobre este mundillo y mucha historia de vida ligada a este oficio y forma de vida.
Ahora llegaremos al lugar donde están colocadas todas las redes, los diferentes compartimentos y donde se harán las maniobras necesarias para dirigir a los atunes hasta el copo donde quedan atrapados.
Es un proceso incierto porque la malla no supera el metro veinte, de forma que solo retiene a los atunes grandes, el resto se escapa sin problemas. Pero a veces, dependiendo de la marea y del día, se escapan todos.
Los almadraberos se ponen manos a la obra, los buzos preparan el material y el capitán va dando las primeras órdenes para que todos estén en su lugar antes de que empiece esta pesca artesanal. Una buena coordinación es importante porque son muchos los almadraberos que participan.
Ya se ve que hay muchos atunes en la mar, los almadraberos lo comentan y se muestran esperanzados.