A menos de tres semanas para su salida, Reino Unido y Bruselas siguen negociando un acuerdo que evite un Brexit duro. Hoy está previsto que el primer ministro británico, Boris Johnson, se reúna con la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.
Las diferencias son aún importantes, señalan desde Bruselas, que se inclina más por el 'no'. Afirman que si Reino Unido quiere acceder a un mercado de 450 millones de ciudadanos europeos, debería a cambio permitir que los pescadores europeos accedan a caladeros británicos. También han diferencias sobre cómo resolver posibles conflictos futuros entre ambas partes. Ambas partes han presentado sus planes de contingencia por si ese acuerdo no llega. Aunque señalan que es mejor un 'no acuerdo' que un mal acuerdo, y abren la puerta a que se puedan alargar las negociaciones como pasa con otros países terceros.
Informa María Carou, corresponsal.