En los últimos años, ha aumentado el interés de los consumidores por conocer la relación entre la dieta y la salud. Muchos alimentos tradicionales como las frutas, las verduras, el pescado y la leche contienen componentes que resultan beneficiosos para nuestro organismo. Sin embargo, los nuevos estilos de vida han provocado el abandono de una alimentación saludables, lo que unido a un mayor sedentarismo, ha propiciado el incremento de enfermedades como la obesidad o la diabetes. Para paliar esta situación surgieron los alimentos funcionales, aquellos que además de nutrirnos son buenos para la salud. Y más recientemente se ha comenzado a hablar de dieta funcional.
Según Daniel Ramón Vidal, doctor en Biología y miembro de la Real Academia de Ingeniería, la idea es no solo alimentarnos para sobrevivir o disfrutar de un buen plato de comida, sino que los alimentos contribuyan a una buena salud física y mental. Y si hay una dieta que cumple con esos requisitos, esa es la mediterránea.
Una población cada vez más longeva y nuevas epidemias como la obesidad y la diabetes, han impulsado el desarrollo de la dieta funcional. Y como recuerda Daniel Ramón, la COVID 19 también ha promovido el consumo de estos alimentos ante la preocuación de los consumidores por fortalecer su sistema inmunitario.
La tendencia, en un futuro, será la nutrución personalizada. Vendrá de la mano de la nutrigenómica, la ciencia que estudia los efectos de la dieta en la actividad de nuestros genes.
Esto es ingeniería
Dieta funcional
28/09/2021
05:49