La Unión Europea se ha fijado el objetivo de una economía neutra en emisones de gases de efecto invernadero para el año 2050. Una meta en línea con los compromisos del Acuerdo de París contra el cambio climático que pasa por la sustitución del petróleo, del carbón y del gas por energías renovables. Pero estas energías también necesitan minerales, tanto para la fabricación de los aerogeneradores y placas solares como para las baterías. Como explica Eloy Álvarez Pelegry --ingeniero de minas y miembro de la Real Academia de Ingeniería-- instituciones como la Agencia Internacional de la Energía, el Banco Mundial o la propia Comisión Europea, prevén un aumento considerable de estas materias primas.
En concreto, un coche eléctrico requiere seis veces más recursos minerales que un coche convencional, y una planta eólica necesita nueve veces más minerales que una central eléctrica de gas de potencia similar. El incremento puede ser considerable en algunos casos según avance la electrificación de la sociedad.
A diferencia del petróleo, la producción y procesamiento de muchos minerales, como el litio, el cobalto y algunos elementos de tierras raras, están muy concentrados en un puñado de países. Los gobiernos europeos --advierte Alvarez Pelegry-- tendrán que actuar para garantizar un suministro fiable y sostenible.
Esto es ingeniería
Los minerales en la transición energética
01/02/2022
05:49