Hoy se ha hecho un gran reconocimiento a uno de los grandes europeístas de la actualidad. Mario Draghi, ex-presidente del Banco Central Europeo, ex-primer ministro italiano y la persona ideal según muchos para presidir la comisión europea por el consenso que despertaría, ha recibido en Yuste, en Cáceres el premio europeo más importante que se otorga en España, el de la Fundación de la Academia Europea e Iberoamericana de Yuste.
Un premio que reconoce su contribución al proyecto europeo y que ha sido una auténtica lección de economía y de como debe ser el proyecto europeo a partir de ahora.
Mario Draghi, una gran figura europea con un perfil completamente diferente a quien cedió su puesto en la presidencia del consejo de ministros de Italia a Giorgia Meloni. Draghi era un hombre de consenso, respetado por todos, Meloni era la líder de Hermanos de Italia, una formación neofascista para algunos, nacionalista conservadora para otros, extrema derecha para unos cuantos.
El relevo fue en 2022, en octubre y en este tiempo Meloni ha sabido labrarse un prestigio que ha reconocido hasta la propia presidenta de la Comisión Úrsula Von der Leyen, quien llega incluso a lanzarle una oferta de cooperación en el nuevo parlamento europeo aunque luego ha dado marcha atrás un poco. Meloni vive seguramente su momento de mayor repercusión internacional como anfitriona del G7, ayer y hoy en Bari, con el papa Francisco, con el presidente estadounidense Joe Biden, con el francés Emmnauel Macron y con la propia Von der Leyen.
Queremos preguntarle por todo esto a Ruth Ferrero, profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense y experta en asuntos europeos.
