El Brexit ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad y la importancia sobre los tratados comerciales y tendrá que determinar su relación futura. La UE, primera potencia comercial mundial por número de alianzas, ha marcado sin embargo líneas rojas. Una primordial es el respeto a los derechos humanos. Lo acaba de demostrar con un país asiático que cada vez exportaba más a la Unión Europea, en virtud de una relación comercial privilegiada que ahora se va a revisar. Es Camboya. La unión le había concedido ventajas arancelarias en virtud del programa Todo Menos Armas, que permitía también el acceso preferente al mercado comunitario. Pero Bruselas ha constatado que no existe en el país el respeto suficiente a los derechos humanos, como nos comenta Lucas González Ojeda, portavoz de la Comisión Europea en Madrid.
Europa abierta en Radio 5
Castigo europeo comercial a Camboya
17/02/2020
07:31