Turingia, estado del centro de Alemania, territorio de la antigua RDA, ha tenido presidente regional sólo por unas horas. Thomas Kemmerich, liberal, el aspirante que menos posibilidades tenía porque su partido, solo obtuvo el 5% de votos en las elecciones de octubre, había aceptado el cargo tras ganar la tercera votación. Fue gracias al apoyo conjunto de su propio partido, el FPD, más el de la CDU, la Unión Demócrata Cristiana, el partido de la canciller Angela Merkel y la ultraderecha de Alternativa Para Alemania. Se rompía el llamado "cordón sanitario" que hasta ahora había impedido que Alternativa accediera a gobiernos o formara parte de pactos. Ha sido tal el escándalo desatado en Alemania, que Kemmerich no ha durado ni 24 horas en el cargo y ha dimitido. Franco Delle Donne, consultor de comunicación, politólogo ,experto en política y autor de varios libros sobre el ascenso de la ultraderecha, analiza con nosotros cómo se ha llegado a esta situación y las posibles consecuencias.
Europa abierta en Radio 5
La ruptura que desestabiliza a Alemania
07/02/2020
08:05