La Unión Europea y China han alcanzado un acuerdo de inversiones que supone un terremoto en el espacio geoestratégico mundial: un acuerdo que conseguirá paliar los fuertes desequilibrios comerciales entre ambas partes. El pacto se ha acelerado en las últimas semanas, después de que Pekín se haya comprometido en algunos aspectos laborales y de política climática. Emilio González, profesor de economía de la Universidad Pontificia Comillas-Icade, reconoce que, con este acuerdo, las empresas europeas tendrán un mejor acceso al mercado chino, pero, en su opinión, hace a la Unión Europea más dependiente de China. También recuerda que la nueva administración Biden pretendía hacer un frente común ante China y que quizás hubiera sido más inteligente hablar primero con Estados Unidos antes de llegar a un acuerdo como este con Pekín. Sin embargo, el profesor no descarta que este acuerdo no pase el escrutinio del Parlamento Europeo (30/12/20).
